Él nos hace sus hijos, y nos lo revela en su Hijo Predilecto y Amado, Jesús, por el que nos salva y nos da, por amor, la vida eterna. Nadie puede atentar contra la vida de uno cualquiera de sus hijo, ni siquiera por los más inútiles e indefensos. Todos son amados con la misma intensidad por su Padre Dios.
Por eso, el hombre no puede cambiar el derecho natural y hacer lo que le venga en gana según sus intereses. Hoy la Ley Natural pierde fundamento en base a ese relativismo imperante en nuestro mundo, pero la dignidad de ser hijos de Dios prevalece por encima de lo que el hombre quiera pensar y defender.
Blogueros con el Papa, junto a "40 días por la vida desde Perú, y otras asociaciones, defienden la vida porque sólo a Dios pertenece. Enlazamos este grito de defensa por la vida desde Blogueros con el Papa, y aquí también.
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